Con una caravana y globos blancos, motociclistas clamaron justicia por la muerte de Daniel Bonilla de 16 años asesinado por agentes policiales la semana pasada en Comayagüela.
«Tengo fe que se hará justicia, era un niño de 16 años», dijo el padre del menor fallecido.
La multitudinaria y atípica protesta partió del barrio Morazán y concluyó en Casa Presidencial.