El presidente de Francia, Emmanuel Macron, pidió el miércoles a los políticos moderados de la izquierda y la derecha que se reagrupen para derrotar a la ultraderecha en las elecciones generales.
Macron, un político centralista y proempresarial, dijo que quiere que “hombres y mujeres de buena voluntad que fueron capaces de decir ‘no’ a los extremos se unan para construir un proyecto conjunto” para el país.
El mandatario, con aspecto sombrío, se dirigió a los franceses por primera vez el miércoles desde que el domingo convocó elecciones anticipadas tras la contundente derrota de su parto frente a la extrema derecha en los comicios al Parlamento Europeo.
A diferencia de sus últimos discursos a la nación, en los que se centró en la guerra de Rusia en Ucrania y en cómo Europa debía forjar una política de defensa comunitaria, independiente de Estados Unidos, y aumentar las protecciones comerciales contra China, Macron se ciñó a las cuestiones internas que impulsaron el auge de la derecha, incluyendo los límites a la inmigración, la lucha contra la delincuencia y el separatismo islámico en Francia.
Macron dijo que decidió disolver la Asamblea Nacional, la cámara baja del parlamento francés, porque no podía ignorar la nueva realidad política luego de que su partido proeruopeo sufrió una aplastante derrota y recibió menos de la mitad de los votos que la Agrupación Nacional con su flamante líder Jordan Bardella.