Se esperan totales de lluvia de dos dígitos en gran parte del sur de Florida en medio de una tormenta torrencial que traerá oleadas de aguaceros hasta el viernes. En algunas localidades ya se están acercando a 30 centímetros de agua, con algunas de las lluvias más intensas aún por llegar. Las alertas de inundación cubren el sur de Florida, incluyendo Miami, Fort Lauderdale, Palm Beach, Fort Myers y Naples, y se han extendido hasta la noche del jueves.
En el aeropuerto internacional de Sarasota-Bradenton cayó 10 centímetros en una sola hora entre las 7 y las 8 pm del martes, el mayor total de lluvia en una hora observada allí desde que comenzaron las observaciones horarias en 1972. Algunas localidades vieron 20 centímetros en tres horas, un evento que en promedio tiene solo un 0.1% de probabilidad de ocurrir en cualquier año. El centro de Sarasota era prácticamente intransitable durante el pico de la lluvia, que dejó calles e intersecciones sumergidas mientras el agua llegaba a los negocios de la zona. Se reportaron 23 centímetros de lluvia en la IMG Academy, en la cercana Bradenton. Una advertencia de inundación repentina cubrirá la zona.
Miami y partes de Fort Lauderdale también fueron puestas bajo una advertencia de inundación repentina durante la noche. Se informó un total de 17 centímetros en Sunny Isles Beach en Miami, con 15 centímetros en Hollywood y 13 centímetros en North Miami.
El mismo sistema de tormentas podría incluso adquirir algunas características tropicales marginales y está siendo monitoreado por el Centro Nacional de Huracanes. Es poco probable que se desarrolle, pero es un signo de que los océanos se están calentando, y no pasará mucho tiempo antes de que la atmósfera se vuelva propicia para la formación de tormentas tropicales y huracanes. En el caso improbable de que el sistema madure, lo cual el Centro de Huracanes estima tiene solo un 20% de probabilidad, se le daría el nombre de Alberto.