Varias tumbas han sido profanas en el cementerio Jardines del recuerdo de la ciudad de Catacamas de Olancho.
El celador quien se identificó como Alex Mendoza, presume que la profanación puede deberse a ritos satánicos e incluso a robos de pertenencias de valor de los cadáveres.
Mendoza hace un llamado a familiares que tienen a sus parientes fallecidos enterrados en el camposanto, para que hagan los respectivas reestructuraciones a las fosas.