Al menos una persona ha muerto y más de treinta se encuentran atrapadas por el derrumbe este lunes de una mina en el estado de Níger, en el centro-oeste de Nigeria, informó este martes la Agencia de Gestión de Emergencias de la región (NSEMA).
«Se ha confirmado la muerte de una persona y seis han sido rescatadas con heridas graves, mientras que más de treinta siguen atrapadas«, declaró a los medios locales el director general de la NSEMA, Abdullahi Baba-Arah.
Según Baba-Arah, la causa del derrumbe de la mina, situada en el pueblo de Galkogo y propiedad de la empresa African Minerals and Logistics, fue la intensa lluvia, que afectó al suelo e hizo que el yacimiento se desplomara.
La agencia de emergencias no cuenta con todos los detalles de las operaciones de rescate debido a la inseguridad en la zona, amenazada por la violencia de los bandidos, añadió el director general de la NSEMA.
No obstante, dijo que se han enviado excavadoras al lugar del accidente para contribuir en las labores de búsqueda y rescate de los más de treinta atrapados.
Algunos estados de Nigeria -sobre todo del centro y noroeste del país- sufren ataques incesantes por parte de los llamados bandidos, término usado para nombrar a las bandas criminales que cometen asaltos y secuestros masivos para exigir cuantiosos rescates y a cuyos integrantes las autoridades tildan a veces de terroristas.
Los ataques se repiten pese a las repetidas promesas de acabar con la violencia por parte del Gobierno nigeriano, que asegura haber reforzado el despliegue de fuerzas de seguridad.
A esta inseguridad se suma la provocada desde 2009 por la actividad del grupo yihadista Boko Haram en el noreste del país y, a partir de 2016, también de su escisión, el Estado Islámico en la Provincia de África Occidental (ISWAP, por sus siglas en inglés).
