El primer ministro de Reino Unido, Rishi Sunak, ha advertido esta semana a los ciudadanos de que Gran Bretaña tiene «unos de sus años más peligrosos» por delante y que el país se encuentra en una «encrucijada» de seguridad.
Pero su viceprimer ministro, Oliver Dowden, que ha promovido la primera web gubernamental de asesoría para emergencias, ha ido incluso más allá y ha instado a las familias a acumular víveres, herramientas y agua.
Dowden les ha dicho a los británicos que deberían de tener diseñados planes de contingencia para hacer frente a posibles emergencias, como cortes de energía prolongados, ataques cibernéticos e inundaciones.
Esta obsesión de Dowden no es nueva, pues ya dijo hace un año que la gente debería abastecerse de linternas y radios para aumentar su «resiliencia personal». Fue él quien introdujo el primer sistema de «alerta de emergencia», que permite a las autoridades activar una alarma en millones de teléfonos móviles de una crisis potencial. Y ahora la web.
Al describir las amenazas más actuales, Sunak amplió a la acción de estados antioccidentales, incluidos China, Rusia, Corea del Norte e Irán. Así como otros desafíos como el aumento de la inmigración y la inteligencia artificial.
Desde la oposición han cargado contra el Gobierno, al que se le pide que construya defensas lo suficientemente fuertes para proteger contra ataques cibernéticos y garantice el mantenimiento para evitar cortes de energía prolongados.
Reino Unido es uno de los países en el que más se ha asentado el movimiento de los preparacionistas, que son personas que llevan tiempo entrenándose en habilidades de supervivencia y acumulando víveres, herramientas, armas y otros artículos en previsión de una emergencia o una hecatombe.
El fenómeno ‘prepper’ surgió en EE UU, ligado a una ideología ultra cercana a las milicias, bajo el precepto de que que hay que defender a la familia de las turbas y el caos social en caso de una emergencia natural o política.
En 2004, el gobierno británico lanzó una campaña de información pública similar. Asesoró a los ciudadanos británicos sobre qué hacer en caso de un desastre natural, un accidente o un acto de terrorismo. Comenzó a raíz de varios desastres importantes, incluidos los atentados con bombas en los trenes de Madrid de 2004, el SARS y la crisis de fiebre aftosa de 2001 en el Reino Unido.
Se presentó en forma de un folleto de 22 páginas que trataba temas como los accidentes de transporte, la salud, el terrorismo y la seguridad contra incendios.
El kit de supervivencia que sostiene el Gobierno que debe de tener un hogar británico estaría formado suministros para tres días, radio, linterna, baterías portátiles, botiquín de primeros auxilios, desinfectante de manos y toallitas húmedas. Alimentos no perecederos que no necesiten cocinarse, agua embotellada, alimentos para mascotas, suministros para bebés y la medicación requerida.
Preparacionistas en España
En España ya con la pandemia resurgió el movimiento social que se prepara anticipadamente a las emergencias naturales o políticas. Nos solo la covid, sino también la borrasca Filomena, la subida del precio de la luz, el temor a desabastecimientos y la amenaza de un gran apagón acercaron a más ciudadanos en España a la comunidad «preparacionista».
El aumento del número de desastres naturales relacionados con el clima y el descenso de la confianza en las infraestructuras y en las instituciones para manejar las consecuencias de un desastre, detrás de este auge.