Olimpia volvió a tener una noche histórica, revitalizante después de pasar por ciertas penas. El Albo liquidó la serie de semifinal contra Motagua con un contundente 4-3. No obstante, no fue fácil, tuvieron que pasar por un tormento para alcanzar la gloria.
A los 4 minutos Chirinos despegó por la izquierda y le sirvió el balón a Arboleda quien fácilmente se dio la vuelta y anotó el 1-0. Nada que hacer para un Rougier acostumbrado a los goles del colombiano.
11 El Droopy Gómez anotó una bestialidad de gol. Tiro libre impecable del argentino que se clavó en el fondo de la red.
21 Entrada descomunal José García y el árbitro cobró penal. Rubilio Castillo la bestia negra de los Merengues.
Comenzando el segundo tiempo Olimpia igualó los cartones a través de un lanzamiento de penal. Jerry Bengtson hizo lo suyo y rompió la red estableciendo el 2-2.
Motagua no iba a cansarse, quería terminar con la paternidad de una vez por todas. Droopy levantó la pelota y Carlos Meléndez de cabeza con toda la fuerza aérea activada anotó el 3-2. Este era otro Motagua, un equipo que creía que lo lograba.
Sin embargo, los errores se pagan caro. El sistema defensivo Azul fracasó como en los últimos campeonatos y todo el trabajo que el águila había hecho se fue a la basura.
Andy Nájar entró hecho una bestia y se mandó tremendo gol que liquidó los sueños, las aspiraciones y cualquier ambición de Motagua. Y a dos del Final Bengtson cayó en el área y empujó la redonda para decretar el 4-3. Las águilas nunca supieron sostener un resultado y no les ajustó con ese plantel remendado para hacerles frente al Tricampeón. La PATERNIDAD Continúa.