La lección sobre los riesgos del cambio climático está aprendida. Desde la primera de las tres crecidas, el Ayuntamiento prohibió la construcción de casas a menos de 100 metros de la orilla del río Taquari. Además, expropió varios terrenos donde construir una nueva ciudad.
Muçum, un pequeño municipio al sur de Brasil destruido por las inundaciones, prepara el traslado de un tercio de la población a terrenos altos y lejos del río que la ha inundado tres veces en los últimos ocho meses.
La lección sobre los riesgos del cambio climático está aprendida. Desde la primera de las tres crecidas, el Ayuntamiento prohibió la construcción de casas a menos de 100 metros de la orilla del río Taquari. Antes no había restricción alguna.
Además, expropió varios terrenos donde construir una nueva Muçum. Son 100.000 metros cuadrados de eucaliptos y campos sin cultivar en los que el municipio prevé construir viviendas, un centro de salud y una zona comercial. También se trasladará el cementerio, que el río dejó hecho una papilla de lápidas.