El estado brasileño de Rio Grande do Sul ha sufrido el “peor desastre climático” tras un intenso temporal. Según las autoridades, el saldo de 29 muertos en el territorio incrementará con el paso de las horas. El gobernador ‘gaúcho’, Eduardo Leite, lamentó en una conferencia de prensa las muertes contabilizadas y estimó que son “muchas” las que aún no fueron registradas, tras deslizamientos e inundaciones en localidades aisladas desde hace 48 horas. Los desaparecidos ascienden a 60.
El presidente Luiz Inácio Lula da Silva prometió que “no faltarán recursos” humanos ni materiales para “minimizar el sufrimiento que este evento extremo de la naturaleza está causando en el estado”.
”El gobierno federal estará 100 por ciento a disposición del estado” para las tareas de rescate y reparación, añadió Lula junto a Leite, tras llegar junto a una comitiva de ministros a la localidad de Santa María, uno de los municipios afectados por las intensas lluvias.