El comisario de la Policía Metropolitana de Londres (Met), Mark Rowley, ha admitido este miércoles que una agente del cuerpo podría llegar a perder un brazo a consecuencia del ataque con espada perpetrado ayer por un hombre en el este de Londres.
En el suceso ocurrido el martes a primera hora cerca de la parada de metro de Hainault, este de la capital, un niño de 14 años resultó muerto y otras cuatro personas fueron heridas. Todas las víctimas tuvieron que ser hospitalizadas.
«Lo primero que hay que decir es para los padres implicados, hemos perdido a su hijo de 14 años y esto es simplemente espantoso, es la peor pesadilla de todo el mundo. Estoy seguro de que todos pensamos en ellos», indicó Rowley en declaraciones hechas hoy a LBC.
El comisario recordó que los agentes acudieron al lugar de los hechos «en 12 minutos» y que el agresor, un varón de 36 años, «fue detenido tras 22 minutos».
«Obviamente, algunos de los primeros contactos (con el agresor) llevaron a que los agentes resultaran muy gravemente heridos», dijo.
Uno de los policías, un varón, «tiene graves heridas en la mano» mientras que otra policía (mujer) «estuvo varias horas siendo operada ayer tras recibir heridas horrorosamente graves en un brazo».
Sobre esta última, Rowley admitió que la agente «no está muy lejos» de perder el brazo a consecuencia del ataque.
La policía ha descartado que el ataque guarde alguna relación con terrorismo.