Un bebé de 15 meses ha muerto este lunes en la localidad italiana de Eboli (Salerno, sur) a causa de las heridas que le provocó el ataque dos perros de raza pitbull, que también hirieron a su madre mientras intentaba rescatarlo.
El pequeño se encontraba en brazos de su tío cuando, al salir de su casa, los perros se abalanzaron sobre el niño y se lo arrebataron de las manos, según han informado los medios italianos.
Al lugar del ataque, a unos 85 kilómetros de Nápoles, se trasladaron más de un centenar de sanitarios, así como una dotación de Carabineros (policía militarizada), mientras la Fiscalía de Salerno (sur) ha abierto una investigación sobre los hechos.
Sobre el caso se ha pronunciado la principal asociación de consumidores de Italia, Codacons, que ha pedido «en voz alta que se adopten medidas para garantizar la seguridad de los ciudadanos y limitar el fenómeno de los perros potencialmente peligrosos». «Más allá del caso concreto y de la dinámica que provocó el ataque (…) no hay duda de que existen razas de perros potencialmente peligrosas para el ser humano», señaló en un comunicado.
Desde 2009, Italia no cuenta con una lista oficial de perros potencialmente peligrosos y, desde 2013, último año en que se aprobó una legislación sobre el tema, se señala al propietario como responsable tanto civil como penalmente de los daños o lesiones causados a terceros, así como de la educación del animal.
En Italia se producen cada año 70.000 ataques de perros contra personas, según Codacons, que sostiene que «independientemente de la educación que se le dé al animal, es universalmente conocido que algunas razas pueden causar heridas letales en caso de mordedura».
En este sentido, ha pedido una «licencia obligatoria» para poseer perros potencialmente peligrosos, ya que «la mordedura de un Pomerania no causa las mismas heridas» que un pitbull, ha zanjado la organización.