Honduras es catalogado como uno de los países más violentos del mundo, San Pedro Sula y Tegucigalpa figuran entre los listados de las ciudades más violentas.
Esto enciende las alarmas entre los Defensores de Derechos Humanos porque son miles de hondureños que abandonan el país huyendo de la delincuencia.
Según los Defensores de DDHH la matrícula baja por familias que huyen del país, por su parte la Secretaría de Educación asegura que la matricula se superará.
Se espera que las autordiades puedan disminuir la delincuencia para evitar que familias sigan huyendo del país.