Un juez autorizó la extracción de información de los dispositivos móviles del ex vicepresidente sentenciado e investigado por corrupción, Jorge Glas, que tras ser asilado por México fue detenido el pasado 5 de abril en la sede diplomática de ese país en Quito. Con la resolución del juez, el Ministerio Público tendrá la facultad de extraer, analizar, materializar y transcribir la información contenida en los dispositivos digitales incautados al ex vicepresidente.
Se explotará una tablet y dos smartphones, todos de la marca Apple. Según consta en la información judicial, uno de los teléfonos móviles carece de número de serie, según lo indicado en el documento de la Función Judicial.
El ex presidente Rafael Correa se han pronunciado sobre el fallo del juez y ha asegurado que la información que se extraiga de los dispositivos no puede ser usada por la Fiscalía, pues el viernes pasado un tribunal declaró la detención de Glas en la Embajada de Quito como “ilegal y arbitraria”, con ese argumento, Correa asegura que los datos de los teléfonos y la tablet serían evidencias “fruto del árbol envenenado”. Ese término legal hace referencia a la evidencia obtenida de manera ilegal o inconstitucional. La metáfora sugiere que, al igual que un fruto contaminado, cualquier prueba derivada de una actividad ilegal está contaminada y no puede ser utilizada en un juicio debido al principio de la “fruta del árbol envenenado”. Esto se basa en la premisa de que permitir el uso de pruebas obtenidas ilegalmente podría incentivar a las autoridades a violar los derechos constitucionales en busca de evidencia. Por lo tanto, cualquier prueba obtenida mediante una actividad ilegal se considera inválida y no puede ser admitida en un juicio.