En un barrio de Quimistán, Santa Bárbara una familia alberga la esperanza de que una joven resucitará tras haber sido declarada como muerta.
La joven Mirna Rodríguez murió ayer a las 5:00 PM, pero su mamá, quien es pastora, se niega a sepultarla porque ella revivirá.
Un mensaje divino tiene a esta familia santabarbarense con la fe intacta puesta en la resurrección. Según la pastora Dominga, Dios le reveló que la muchacha volverá a la vida.
Los vecinos saben del fallecimiento y aguardan por lo que pueda ocurrir en las próximas horas. No obstante, se sabe que la joven está inerte en una cama, no hay ataúd.