Un cáncer linfático le habría quitado la vida a Mirna Rodríguez, quien desde las 05:00 de la mañana de ayer domingo está siendo velada por sus familiares en Quimistán, Santa Bárbara, quienes esperan se levante y vuelva a la vida.
Mirna ya había visitado varios médicos, pero ninguno le devolvió la salud. Ayer perdió el conocimiento y no volvió a despertar.
Los familiares aseguran que Rodríguez «está en un sueño profundo». La Pastora Dominga, madre de la fallecida, asegura que su hija despertará para testificar que Dios es real, solamente está durmiendo mientras Dios le revela muchas cosas.
«Ella no se ha descompuesto, está así desde hace 24 horas», dijo la hermana de la fallecida.