El Papa Francisco ha aceptado este martes la renuncia de Ángel Fernández Collado como obispo de Albacete. El prelado aseguró en un encuentro informativo que esta renuncia se produce «por motivos de enfermedad», pues tiene «la salud quebrantada» tras varias intervenciones quirúrgicas en sus ojos y otras dolencias.
El Pontífice lo nombró obispo auxiliar de Toledo el 28 de junio de 2013, tres años después de ser nombrado Papa, hace casi seis años. Recibió la ordenación episcopal el 15 de septiembre del mismo año.
El 25 de septiembre de 2018 se hacía público su nombramiento como obispo de Albacete, sede de la que tomó posesión el 17 de noviembre del mismo año. En la Conferencia Episcopal Española es miembro de la Comisión Episcopal para la Liturgia.
Con la decisión del Papa, se adelanta la renuncia del prelado, establecida por la normativa eclesial cuando un obispo cumple los 75 años, edad que aún no ha alcanzado Fernández Collado.
Según ha informado la Conferencia Episcopal, Fernández Collado nació en Los Cerralbos (Toledo) el 30 de mayo de 1952. Cursó estudios eclesiásticos en el seminario mayor ‘San Ildefonso’ de Toledo. Obtuvo el Bachillerato en Teología por la Facultad de Teología del Norte de España, sede de Burgos, en 1977. Este mismo año, el 10 de julio, fue ordenado sacerdote en la archidiócesis de Toledo.
Es Licenciado (1984) y Doctor en Historia de la Iglesia (1992) por la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma. También es Diplomado en Archivística por la Escuela Vaticana de Paleografía, Diplomática y Biblioteconomía (1984).