Ecuador defendió este martes la irrupción en la embajada de México en Quito como un acto de “cumplimiento de las sentencias” contra el exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas.
En una reunión del consejo permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA), el país suramericano acusó a México de promover “la impunidad” al otorgar asilo diplomático a Glas.
“A pesar de que el señor Glas era sujeto a sentencias ejecutoriadas por delitos comunes, la embajada de México lo recibió en calidad de huésped y posteriormente pasó a ser considerado solicitante de asilo…. logrando así evadir la justicia”, dijo Alejandro Dávalos, viceministro de Movilidad Humana de Ecuador, ante los representantes latinoamericanos en la sede de la OEA en Washington.
La embajadora de México ante la OEA, Luz Elena Baños, no estuvo presente en la sesión. Sin embargo, su gobierno ha sido claro en el rechazo a las acciones de Quito y la forma “autoritaria y vil” en la que la policía ecuatoriana irrumpió en la misión diplomática.
Al presentar imágenes inéditas del allanamiento, el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador anunció este martes que su gobierno presentará una acción legal contra Ecuador ante la Corte Internacional de Justicia. “¡A México se le respeta!”, afirmó tajante.
Dávalos acusó a la embajada mexicana de “desmerecer” los aspectos judiciales en contra de Glas al permitirle permanecer en la embajada, “impidiendo el funcionamiento del sistema judicial ecuatoriano”.
“México ha hecho énfasis en la importancia y respeto que otorga a la institución del asilo. No obstante, su actitud socava y desnaturaliza la figura del asilo diplomático… al concederlo a un condenado prófugo de la justicia ecuatoriana”, agregó Dávalos.
El funcionario ecuatoriano dijo que Glas representaba un “riesgo de fuga inminente”, aún al interior de la embajada mexicana en Quito.