Con la finalidad de dar respuesta a delitos sexuales cometidos contra los más vulnerables, funcionarios de investigación capturan a un individuo por suponerlo responsable del delito de violación continuada en perjuicio de su hijastra de tan sólo 10 años de edad.
Tras llevar a cabo diferentes acciones investigativas, mediante seguimiento y vigilancia, por parte de agentes asignados a la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), en conjunto con la Dirección Nacional de Prevención y Seguridad Comunitaria (DNPSC), se logró ubicar y arrestar al sospechoso en el barrio Santa Ana, municipio de Campamento, Olancho.
El supuesto agresor sexual, es un jornalero de 43 años, originario y residente del mismo municipio donde se ejecutó su formal captura.
Según las diligencias investigativas realizadas por los investigadores, el sospechoso quién es el padrastro de la menor obligaba a la niña a tener relaciones sexuales mediante amenazas que si decía algo, mataría a su madre y a toda la familia, acción que venía realizando desde que la víctima tenía 8 años de edad.
Una vez se tuvo conocimiento del repudiable hecho, se procedió a recuperar a la niña, la cual fue atendida y evaluada por los médicos, posteriormente fue entregada a las autoridades de la Secretaria de Niñez, Adolescencia y Familia(SENAF) del municipio de Catacamaa, Olancho.
Asímismo, los agentes encargados del caso fueron los responsables de recabar información y las pruebas contundentes que inculpan al sospechoso de cometer el delito de cuál es acusado.
Por lo tanto, al imputado se le ejecutó una orden judicial pendiente emitida por los Juzgados de Letras de la Sección Judicial de Juticalpa, desde el pasado 13 de octubre del año pasado, por suponerlo responsable del delito de violación calificada continuada contra ella de 10 años.
Esta importante operación policial fue posible, gracias al eficaz trabajo por parte de los uniformados a través de las diversas acciones ejecutados en el departamento de Olancho.
Por lo tanto el sospechoso, una vez que fue arrestado los agentes de la DPI le dierón a conocer sus derechos y lo trasladarón a los juzgados correspondientes para continuar con el debido proceso por el delito que se le imputa.
La Dirección Policial de Investigaciónes trabaja en coordinación con las demás entidades policiales con la finalidad de velar por los derechos de los niños y poner a disposición de la justicia a toda persona que cometa este tipo de delitos contra los menores.