Cal-Maine Foods, Inc., el mayor productor de huevos frescos de Estados Unidos, anunció en un comunicado el martes que había detenido temporalmente la producción en una planta en Texas después de detectar un brote de gripe aviar en sus animales.
Según el comunicado, la compañía está “trabajando estrechamente con funcionarios de los gobiernos federal, estatal y local y grupos industriales enfocados para mitigar el riesgo de futuros brotes y gestionar eficazmente la respuesta».
1.6 millones de gallinas sacrificadas
Una de las medidas de mitigación del riesgo fue el sacrificio de cerca de 1.6 millones de gallinas ponedoras y 337,000 crías, aproximadamente el 3.6% del total de sus animales en la instalación ubicada en el condado de Parmer, cerca de la frontera con Nuevo México.
Cal-Maine, que vende la mayoría de sus huevos en las regiones del suroeste, sureste, medio oeste y medio Atlántico de Estados Unidos, dijo que «está trabajando para asegurar la producción de otras instalaciones para minimizar las interrupciones para sus clientes».
Según Cal-Maine, no se conoce ningún riesgo de gripe aviar asociado con los huevos que se encuentran actualmente en el mercado, por lo que no se han retirado huevos del mercado.
El anuncio se produce un día después de que funcionarios de salud estatales dijeran que a una persona se le había diagnosticado gripe aviar después de haber estado en contacto con vacas que se presume estaban infectadas, lo que constituye el primer caso conocido en el mundo de una persona que contrae esta versión de la gripe aviar de un mamífero.
La semana pasada se informó de brotes de gripe aviar en vacas lecheras en Texas y Kansas.
Aún así, las autoridades insisten en que el riesgo asociado al brote sigue siendo bajo. De acuerdo a los lineamientos del Departamento de Agricultura de EEUU (USDA), los huevos que se manipulan y cocinan adecuadamente son seguros para comer.