Autoridades mexicanas informaron que ya fueron localizadas 58 de las 66 personas raptadas en un secuestro masivo el viernes en la ciudad de Culiacán, en el estado de Sinaloa (noroeste).
“El día de hoy hay 16 personas más que han retornado a sus domicilios y son 12 adultos y cuatro menores de edad”, para un total de 58 personas encontradas, dijo este domingo en la red social X Gerardo Mérida, secretario de Seguridad Pública de Sinaloa.
El gobierno local había reportado la víspera un balance de 42 personas halladas.
“Únicamente estamos trabajando para poder localizar o determinar qué pasa con esas ocho personas que están pendientes”, añadió.
Desde el viernes pasado, las autoridades de Sinaloa indagaban el secuestro masivo registrado en barrios obreros de Culiacán.
El gobierno estatal dijo inicialmente que habían sido raptadas 25 personas, aunque más tarde precisó que fueron 66 en total.
El gobierno local no han informado las razones detrás de los hechos ni ha anunciado alguna detención.
Mérida dijo este domingo que ninguna de las personas que han sido encontradas con vida ha querido denunciar.
Un reporte de la Secretaría de Seguridad al que tuvo acceso un colaborador de la AFP señala que los secuestradores arribaron en camionetas con armas y realizaron disparos al aire, de acuerdo con testimonios recabados.
Medios de Sinaloa aseguraron que las personas raptadas pertenecerían a siete familias de diferentes barrios de Culiacán.
Tras las denuncias, el gobierno anunció un operativo especial con militares y miembros de la Guardia Nacional para localizar a las víctimas.
Culiacán ha sido escenario de violentas asonadas del cártel de Sinaloa en octubre de 2019, durante el fallido arresto de Ovidio Guzmán, hijo del narcotraficante Joaquín “Chapo” Guzmán, y en enero de 2023 cuando el heredero del capo fue finalmente capturado.
Los secuestros se produjeron un día después de que tres personas murieran durante un enfrentamiento armado en la localidad de Badiraguato, cuna del Chapo, quien purga cadena perpetua en Estados Unidos por narcotráfico y lavado de activos.
México sufre cotidianamente los embates del crimen organizado con matanzas, secuestros y desapariciones forzadas.
Según cifras oficiales, el país acumula unos 450.000 asesinatos y más de 100.000 desaparecidos desde 2006, cuando el gobierno declaró una guerra abierta al narcotráfico con participación de los militares.