En una conversación con Bustle publicada el 14 de marzo, Lindsay Lohan abordó cómo la intrusiva atención de los paparazzi afectó de manera muy profunda tanto su carrera como su vida privada, lo cual la llevó a desaparecer de todos los medios de comunicación.
“Siento que parte (de mi trabajo) quedó eclipsado por los paparazzi y todo ese tipo de cosas cuando era más joven, y eso es algo molesto. Ojalá esa parte no hubiera ocurrido”, reflexionó la actriz que recientemente anunció su regreso a la pantalla grande. “Siento que eso como que tomó vida propia. Por eso quise desaparecer. Me dije: ‘A menos que no haya una historia aquí, no se van a centrar sólo en mi trabajo’”.
La decisión de Lohan también se debe mucho al contexto en el que vivía, donde las redes sociales no existían y no podía compartir su versión de la historia. Incluso al día de hoy, Lindsay evita acercarse a las revistas de chismes que tanto afectaron su autopercepción durante muchos años.
“Las redes sociales son tan diferentes ahora que cuando yo era más joven, que todo el mundo tiene el control de su propia historia. No le presto mucha atención (a los tabloides). Tampoco leo las cosas que salen. Porque sé cómo funciona, así que no tiene sentido. Y si te sumerges en esas cosas, te pierdes, y pueden afectarte mucho”.
A sus 37 años, Lohan ha regresado a la escena del entretenimiento, marcando su presencia con apariciones especiales y nuevos proyectos. Este 2024, participó en el remake musical de Chicas Pesadas, además de firmar un contrato para dos películas con Netflix que comenzó con Falling for Christmas en 2022 y el próximo estreno de Irish Wish.
Sin embargo, incluso en esta nueva etapa lejos de los excesos y escándalos, Lohan aún se enfrenta a los estragos que dejó su antigua vida.
En el remake de Chicas Pesadas aparece una escena donde la rapera, Megan Thee Stallion, menciona que “la entrepierna pelirroja de principios del 2000″. Esta es una clara referencia al apodo que el heredero del petróleo, Brandon Davis, le puso a la actriz en medio de una riña que Paris Hilton y Lindsay Lohan tuvieron en aquellos días.
Davis llegó a mencionar que Lohan era pobre por tener una fortuna de “apenas” 7 millones de dólares y aseguró que nadie querría acostarse con ella, todo esto frente a las cámaras de los paparazzis y la risa de Paris Hilton.
El que Tina Fey, guionista de este remake, mencionara uno de los momentos más oscuros de Lohan, fue un golpe muy duro para la actriz, quien, a través de un representante, confesó sentirse “muy decepcionada”.
El retorno de Lohan a la industria no solo marca una nueva etapa en su carrera sino también en su vida personal, ahora como madre de su hijo de 8 meses, Luai, fruto de su matrimonio con Bader Shammas.
Anteriormente, la actriz mencionó en una entrevista con E! News cómo la maternidad la ha llevado a adoptar un enfoque más metódico en la selección de sus proyectos, buscando aquellos que su hijo pueda ver sin avergonzarse o sentirse incómodo cuando crezca, pero también otros tantos que la inspiren personalmente.
Definitivamente, la maternidad ha cambiado las prioridades de Lohan, pues más allá de sus deseos de regresar a Hollywood, también quiere hacer su familia más grande. En The Drew Barrymore Show, Lindsay aseguró que Luai tenga un hermano pronto y disfrute de una infancia como la que ella tuvo con sus hermanos Michael, Aliana y Dakota.
