El gobernador de Florida, Ron DeSantis, firmó el viernes varios proyectos de ley que aumentan las sentencias de prisión para los inmigrantes que viven ilegalmente en Estados Unidos si son declarados culpables de conducir sin licencia o de cometer delitos graves.
El gobernador republicano, que el mes pasado concluyó su campaña por la nominación presidencial de su partido, también ha enviado por avión a Massachusetts y California a inmigrantes que entraron sin autorización al país por la frontera de Texas.
“No toleramos la inmigración ilegal, y mucho menos los desórdenes cometidos por extranjeros ilegales que, para empezar, no deberían estar aquí. Los proyectos de ley que he firmado aumentan aún más las capacidades de Florida para hacer respetar la ley”, dijo DeSantis.
El gobernador vinculó el proyecto de ley relacionado con la licencia de conducir con una ley de Florida que ya prohíbe que los migrantes que están ilegalmente en el país obtengan ese documento. Asimismo, aumenta la sentencia máxima para cualquier persona culpable de conducir sin licencia dos veces o más, de 60 días a un año de cárcel; esto se aplica por igual a ciudadanos estadounidenses e inmigrantes que estén en el país sin autorización.
Algunos grupos de apoyo a migrantes han criticado el proyecto de ley, y afirman que pone en riesgo la seguridad del público, ya que muchos de los inmigrantes a los que se les prohíbe tener una licencia seguirán conduciendo, simplemente no se les harán exámenes ni adquirirán un seguro. Diecinueve estados y Washington DC, expiden licencias de conducir a inmigrantes que están en el país sin autorización, de acuerdo con la Conferencia Nacional de Legislaturas Estatales.
“La verdadera seguridad se consigue con medidas integrales, como la educación de los conductores, la concesión de licencias a todos los conductores calificados y el acceso a los seguros, no mediante la aplicación punitiva de la ley”, dijo en un comunicado reciente Renata Bozzetto, de la Coalición de Inmigrantes de Florida. “En lugar de criminalizar a las personas, la legislatura republicana de Florida debería trabajar para invertir en iniciativas que promuevan la seguridad de los conductores, afronten las disparidades en el proceso de concesión de licencias y garanticen un acceso equitativo al transporte para todos los residentes”.