La muerte de Nex Benedict, un estudiante de Oklahoma, fue declarada suicidio, de acuerdo con un informe del médico forense publicado este miércoles.
El joven de 16 años, que era transgénero y utilizaba los pronombres “él” y “ellos”, según amigos y familiares, murió el 8 de febrero, un día después de una pelea en su escuela. Su nombre se ha convertido en un símbolo entre los activistas LGBTQ, quienes argumentan que una avalancha de legislaciones dirigidas contra esa comunidad ha hecho que las escuelas sean menos seguras para los estudiantes queer y transgénero como Nex.
Al parecer, Benedict había contado a su madre que sufría acoso en la escuela debido a su identidad de género. Imágenes de las cámaras corporales difundidas el mes pasado por la policía horas después de la pelea en la escuela lo muestran en la cama de un hospital. En el video, le dice a un agente de policía cómo tres estudiantes “se le fueron encima” después de que les arrojó agua porque lo estaban acosando junto a uno de sus amigos por su forma de vestir.
El 21 de febrero, el Departamento de Policía de Owasso hizo pública información preliminar de la autopsia que, revelaron, indica que la muerte de Benedict no fue consecuencia de traumatismos. Días después, un portavoz del departamento aclaró que no se había descartado que la pelea hubiera contribuido o causado su muerte.