Con marcada ausencia en los recintos de votación, cerraron las urnas la tarde del domingo y se dio inicio al conteo de votos de los comicios municipales en El Salvador, en donde el partido del mandatario Nayib Bukele arribó como el gran favorito para darle al gobernante un control casi total de los espacios políticos en el país centroamericano tras arrasar en las elecciones presidenciales y legislativas.
Bukele se aseguró un segundo mandato en los comicios del 4 de febrero con un porcentaje histórico de 84,6% de los votos válidos a pesar de que la Constitución salvadoreña prohíbe la reelección inmediata. Nuevas Ideas, el colectivo de Bukele, también se apuntó las elecciones legislativas, llevándose 54 de las 60 curules en disputa, a las que se sumaron tres de los aliados Partido de Concertación Nacional y el Democracia. La oposición sólo alcanzó tres escaños.
Un total de 6,2 millones de salvadoreños son aptos para sufragar. En juego están 44 consejos municipales y 20 diputados propietarios y 20 suplentes al PARLACEN con sus respectivos suplentes.
El inicio de la votación estaba previsto para las 7 de la mañana (1300 GMT), pero en muchos lugares se atrasó hasta casi dos horas. En comparación con los comicios presidenciales y legislativos, se notaba una marcada ausencia de votantes en los recintos.
El vicepresidente Felix Ulloa llamó a los salvadoreños a votar.
“En términos generales, las elecciones parecen ser un tema de trámite, no se esperan mayores cambios”, afirmó el director del centro de investigaciones de opinión pública de la Universidad Francisco Gavidia, Óscar Picardo. Los resultados del domingo “terminarán de confirmar la concentración de poder, lo que implicaría mayor debilitamiento de la oposición”.