Las piedras que les lanzaron los aficionados azules a los jugadores de Olimpia y el relajo que se armó en las afueras del estadio Nacional Chelato Uclés, le costó 50 mil Lempiras de multa a Motagua.
Además, los Azules fueron advertidos que de seguir el mal comportamiento, el estadio será suspendido para próximos encuentros.
El presidente del Azul, Pedro Atala, el entrenador Diego Vazquez y el gerente Emilio Izaguirre ya no pueden emitir comentarios contra los árbitros ni los entes disciplinarios o serán castigados según el escrito.
