Filipinas denunció este sábado que un buque de la Milicia Marítima china bloqueó el paso de una embarcación de su Guardia Costera, en un nuevo episodio que se enmarca en las tensiones por las disputas sobre el mar Meridional.
Según informaron las autoridades costeras, el BRP Datu Sanday se encontraba en una misión de reabastecimiento de 44 pescadores locales, que aguardaban cerca del Bajo de Masinloc.
Un video difundido por una cadena local muestra a la nave de Beijing impidiendo a la de Manila avanzar. Según sumaron, el barco extranjero estaba a unos 300 metros del filipino y la maniobra se produjo a tan sólo 1.2 millas náuticas al sur del Pantag Shoal.
No obstante, a pesar de los esfuerzos del régimen de Xi Jinping, el BRP Datu Sanday logró llevar gasolina y paquetes de víveres a los pesqueros.
Este tipo de maniobras son cada vez más habituales en el mar Meridional, donde, además de Filipinas y China, también reclaman soberanía Brunéi, Malasia, Taiwán y Vietnam. Por este paso transitan cada año buques con mercancías por cerca de USD 3.4 billones.
El pasado 11 de febrero, la Guardia Costera de Manila ya había denunciado la interferencia de hasta ocho buques militares chinos, en aquel caso, durante una patrulla de una de sus embarcaciones en la zona del banco de arena del Bajo de Masinloc.
“Las embarcaciones de la Guardia Costera China realizaron maniobras peligrosas y de bloqueo contra el ‘BRP Teresa Magbanua’ cuatro veces, y en dos de ellas se cruzaron delante de la proa en violación de la Regulación Internacional para Evitar Colisiones en el Mar”, mencionaron entonces en un comunicado.
Sin embargo, como hace siempre en estos episodios, Beijing aseguró que se trató de una operación de defensa luego de que las naves de Filipinas ingresaran “ilegalmente en las aguas adyacentes a la isla Huangyan, a pesar de las llamadas de advertencia de los guardacostas”. El servicio de la Guardia Costera “aplicó medidas de acuerdo con la ley, como el control de ruta y su alejamiento, manejando la situación profesionalmente”, insistieron.
Días más tarde, en una nueva muestra de apoyo al país, Estados Unidos movilizó aviones de sus Fuerzas Aéreas hasta la región, para llevar a cabo patrullas conjuntas. Tres aviones filipinos de combate FA-50 y un bombardero estadounidense B-52H sobrevolaron parte de la región occidental del archipiélago asiático con el “objetivo de reforzar la cooperación con los homólogos estadounidenses y salvaguardar el territorio nacional”, indicaba un video con imágenes de las naves en vuelo.
La patrulla tuvo lugar entre las aguas de la localidad de Candon, en el noroeste de la isla de Luzón, y la isla de Lubang, en la región central del archipiélago.
Desde la llegada el pasado año a la presidencia de Ferdinand Marcos Jr., Filipinas -que durante el mandato de Rodrigo Duterte (2016-2022) se acercó a China- dio un giro en un intento por reforzar su histórica alianza de seguridad con Estados Unidos, en especial ante el aumento del acoso por parte de buques chinos.