El próximo miércoles, la Major League Soccer (MLS) tiene pautado el inicio de su temporada y el partido que figura para abrir el fuego es el que el Inter Miami de Lionel Messi y el Real Salt Lake, en elDRV PNK Stadium. Sin embargo, ese encuentro está en duda ante un paro de árbitros, debido a la negativa que recibieron ante un pedido de aumento de sueldo.
Nacida en 1993, la MLS tuvo su mayor crecimiento en el último lustro con la llegada de figuras internacionales, la mayoría en el epílogo de sus carreras, como el caso del crack argentino o sus amigos y ex compañeros del Barcelona, Sergio Busquets, Jordi Alba y Luis Suárez. La presencia de estos astros en la franquicia de la Florida y de otros referentes en varios de los equipos son un salto de calidad a la liga norteamericana.
Por eso la Asociación de Árbitros de Fútbol Profesional (PSRA), le solicitó un aumento de su salario a la Organización de Árbitros Profesionales (PRO), entidad que emplea a los árbitros para las competencias locales, incluida la MLS. La PSRA se reunió para poder analizar la propuesta hecha por la PRO, pero ante la falta de conformidad se dictaminó la medida de fuerza.
“Con el voto del 97,8 por ciento de los miembros elegibles, el resultado de la votación fue un ‘no’ del 95,8 por ciento en cuanto a la ratificación del acuerdo tentativo propuesto”, explicó el comunicado de la PSRA.
“Vivimos para este juego, dándole el 100 por ciento de nuestra dedicación, experiencia, condición física y capacidad”, dijo Peter Manikowski, presidente y negociador principal del PSRA. “El crecimiento vertiginoso de la MLS ha aumentado significativamente las exigencias mentales y físicas de los funcionarios (árbitros) y, como tal, ha aumentado las exigencias tanto de nuestro tiempo profesional como personal. Nuestros miembros piden no sólo una compensación justa en un momento en que la liga está registrando un crecimiento récord, sino también la capacidad de cuidarse a sí mismos para seguir arbitrando al más alto nivel que exige este deporte”. El anterior acuerdo entre la PSRA y la PRO fue ratificado en febrero de 2019 y expiró el pasado 15 de enero.
¿Qué dice la MLS?
La MLS, por su parte, aseguró en un reporte de prensa en su sitio oficial que a principios de esta semana la PSRA y la PRO, habían alcanzado el mayor aumento de compensación en la historia, con un aumento general del 25 por ciento con respecto a 2023 al comparar los salarios.
“Es sumamente decepcionante que los funcionarios hayan votado en contra del acuerdo tentativo sobre un nuevo Convenio Colectivo alcanzado por la Asociación de Árbitros de Fútbol Profesional y la Organización de Árbitros Profesionales”, dijo Nelson Rodríguez, el vicepresidente ejecutivo de Competición y Productos Deportivos de la liga.
“PRO trabajó durante meses y abordó todas las cuestiones planteadas por la unidad negociadora del PSRA. También es desafortunado que la PSRA haya rechazado la oferta del PRO de un compromiso mutuo de no huelga, sin cierre patronal, lo que habría permitido a todos los árbitros del partido continuar trabajando durante las negociaciones en curso”, añadió el funcionario de la MLS.
La liga informó que, pese a este conflicto, manejan un plan B en caso de no poder contar con los árbitros locales. “PRO nos ha informado de su plan de contingencia para la próxima temporada de la MLS, que incluye el uso de árbitros profesionales con experiencia, apoyados por oficiales veteranos del VAR. Confiamos en el plan integral que han implementado”, concluyó en su comunicado.