Este jueves se rendirán los máximos honores al expresidente chileno Sebastián Piñera, quien murió este martes a los 74 años al caer el helicóptero que él mismo conducía en un lago del sur del país. El actual mandatario, Gabriel Boric, decretó tres días de duelo nacional y asistirá a la ceremonia en el Congreso de Chile en Santiago.
Piñera, que gobernó Chile en dos períodos (2010-2014 y 2018-2022), perdió la vida en la región de Los Ríos, cuando el aparato en el que viajaba se estrelló en el Lago Ranco. La ministra del Interior, Carolina Tohá, expresó desde el Palacio de La Moneda, sede del Gobierno, que el ex jefe de Estado recibirá “todos los honores y reconocimientos republicanos que merece”.
Se trata del segundo funeral de Estado que se celebra en Chile en los últimos años, después del que se le dio al expresidente Patricio Aylwin (1990-1994), fallecido en 2016 durante el gobierno de Michelle Bachelet (2006-2010 y 2014-2018). En aquella ocasión, Bachelet pronunció un emotivo discurso sobre Aylwin, el primer presidente elegido tras la dictadura de Augusto Pinochet.
Se espera que Boric haga lo mismo con Piñera, con quien mantuvo una relación cordial pese a sus diferencias políticas. El Jefe de Estado chileno anunció que el Ministerio de Relaciones Exteriores se encargará de la organización de las honras fúnebres, que seguirán el protocolo establecido para estos casos.
En un funeral de esta magnitud en Chile se involucran los tres poderes del Estado, Ejecutivo, Legislativo y Judicial, y es el Ministerio del Interior quien decreta la formalización de las actividades, estipuladas en el reglamento ceremonial público y de protocolo.
Durante los tres días de duelo nacional, la bandera ondeará a media asta en la sede del Gobierno, las instituciones públicas y las Fuerzas Armadas y de Orden Público. Además, se suspenderán todos los actos de Gobierno de carácter festivo que estuvieran programados.
Los detalles de la ceremonia, como el recorrido del féretro y el lugar donde se inhumarán sus restos, serán definidos por los familiares de Piñera, junto al canciller Alberto Van Klaveren.
A las actividades póstumas, que incluirán honores militares, acudirán representantes del cuerpo diplomático, autoridades chilenas civiles y religiosas, y personalidades del extranjero.
El funeral de Aylwin, que murió el 19 de abril de 2016, fue el primero que se realizó en Chile en décadas. Según la prensa local, el protocolo consistió en una misa privada en su casa con sus familiares y amigos cercanos, al día siguiente de su deceso.
El cortejo fúnebre salió desde el domicilio del ex jefe de Estado, dos días después de su muerte, escoltado por Carabineros y recorrió varias comunas de la capital chilena.
Recibió honores y ofrendas en la sede del Partido Demócrata Cristiano y un velatorio en el edificio del ex Congreso Nacional en Santiago, además de una ceremonia religiosa en la Catedral Metropolitana, antes de su sepelio en el Cementerio General, donde Bachelet pronunció su discurso.
Exaccionista de la aerolínea chilena LAN -hoy la internacional LATAM-, de un canal de televisión y del club de fútbol Colo Colo, Piñera fue el primer presidente de derecha desde el regreso de la democracia tras la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).
La revista Forbes llegó a estimar sus activos en 2.400 millones de dólares.
Entusiasta y siempre activo, Piñera, que había cumplido 74 años el pasado 1 de diciembre, ostentaba un doctorado en economía de la Universidad de Harvard y era conocido por pilotar su propio helicóptero.
Casado con Cecilia Morel, padre de cuatro hijos y con nueve nietos, fue presidente de Chile en dos oportunidades, entre 2010 y 2014 y entre 2018 y 2022.