Corea del Norte ha exhibido se poder militar, pero también el férreo control que tiene sobre sus ciudadanos. El gobierno de Kim Jong Un ha filtrado un video de unos jóvenes condenados a 12 años de trabajos forzados por ver K-dramas, como se conocen las series de su vecina y enemiga ideológica, Corea del Sur. El juicio se habría celebrado hace un tiempo pero ahora han salido a la luz las imágenes.
Las imágenes de este juicio público fueron grabadas en Corea del Norte durante la pandemia, según se deduce porque todos los asistentes llevan mascarilla. Los jóvenes son esposados delante de otras personas que asisten al acto en lo que parece ser un estadio.
En las imágenes se ve a los dos acusados, dos adolescentes de 16 años sobre los que ha caído todo el peso de la Ley de Corea del Norte. Los chicos han sido condenados a 12 años de trabajos forzados por haber visto series y videoclips surcoreanos, que entran ilegalmente en el país comunista.
Las imágenes ‘malditas’, en DVD y memorias portátiles, se saltan la censura impuesta por el Gobierno de Kim Jong-un, el líder supremo, desde la frontera china y a pesar de los duros castigos, algunos norcoreanos se arriesgan a verlas.
La dictadura de Kim Jon Un ha endurecido, en los últimos dos años, las penas por mantener cualquier contacto de sus ciudadanos con el extranjero. La propaganda del régimen difunde videos como estos, donde denuncian a mujeres por teñirse el pelo o vestir pantalones al estilo occidental.
Esta nueva legislación llamada «Ley de rechazo de la ideología y la cultura reaccionaria» prohíbe, bajo severas penas de cárcel o incluso de muerte, hablar, escribir, vestirse o incluso cantar al estilo surcoreano. Todo lo que proceda del sur, país con el que llevan oficialmente en guerra desde 1950, está prohibido.
No es la primera vez que Corea del Norte juzga en público a sus ciudadanos, por hechos que en ningún otro país son delitos, pero ya es extraordinario que las imágenes hayan traspasado las fronteras del país más hermético del mundo.