El primer ministro interino de Pakistán, Anwaar ul Haq Kakar, anunció este jueves la prohibición total de las celebraciones de Año Nuevo en solidaridad con el pueblo palestino.
«Teniendo en cuenta la situación gravemente preocupante en Palestina y para mostrar solidaridad con nuestros hermanos y hermanas palestinos, el Gobierno prohibirá estrictamente la celebración de cualquier tipo de acto con motivo del Año Nuevo», indicó Kakar en un discurso a la nación.
El mandatario recordó que más de 21.000 palestinos han muerto hasta la fecha a manos de las fuerzas israelíes, que «traspasaron todos los límites de la violencia y la injusticia». «Toda la nación pakistaní y el mundo musulmán están sumidos en la angustia por la masacre de niños inocentes y el genocidio de palestinos desarmados en Gaza y Cisjordania», agregó.
Kakar afirmó que Pakistán había enviado dos paquetes de ayuda a Palestina y que se estaba preparando un tercero. Asimismo, indicó que las autoridades del país mantenían conversaciones con Jordania y Egipto para evacuar a los heridos en Gaza.
El Ministerio de Sanidad palestino calcula que el número de muertos tras los ataques israelíes supera los 21.000, en su mayoría mujeres y niños, mientras que el número de heridos asciende a 55.603 y el de desaparecidos entre los escombros ronda los 10.000.
