El Papa Francisco pidió un tratado internacional para regular el uso de la inteligencia artificial (IA), advirtiendo del riesgo de que esta nueva tecnología provoque una «dictadura tecnológica» que amenace la paz y la democracia.
El pontífice, de 86 años, quiere que los líderes mundiales acuerden un «tratado internacional vinculante» sobre la IA desarrollado dentro de un marco ético. Francisco hizo el llamado en su mensaje anual para el Día Mundial de la Paz que celebra la Iglesia católica cada 1 de enero.
«La capacidad humana única para el juicio moral y la toma de decisiones éticas es más que una compleja colección de algoritmos, y esa capacidad no puede reducirse a programar una máquina, que por muy ‘inteligente’ que sea sigue siendo una máquina», escribió Francisco.
«Hay que plantearse una serie de preguntas urgentes. ¿Cuáles serán las consecuencias, a mediano y largo plazo, de estas nuevas tecnologías digitales? ¿Y qué impacto tendrán en las vidas individuales y en las sociedades, en la estabilidad internacional y en la paz?».
El Papa lanzó una enérgica advertencia contra los sistemas de armamento controlados por inteligencia artificial, que calificó de «causa de grave preocupación ética», al tiempo que alertó sobre el mal uso de la tecnología, que incluye «la interferencia en las elecciones, el auge de una sociedad vigilada» y el aumento de las desigualdades.
«Todos estos factores corren el riesgo de alimentar los conflictos y obstaculizar la paz», afirmó el papa.
A pesar de su mensaje cauteloso, Francisco elogió los «impresionantes logros de la ciencia y la tecnología», insistiendo en que la IA también ofrece «oportunidades apasionantes».
En una rueda de prensa celebrada este jueves en el Vaticano para dar a conocer su mensaje, el cardenal Michael Czerny, uno de los colaboradores del papa, insistió en que Francisco no es «ningún ludita», pero que la IA es una de las «apuestas» más importantes para el futuro de la humanidad.
El llamado del papa a regular la IA se produce pocos días después de que funcionarios de la Unión Europea llegaran a un acuerdo provisional sobre una nueva ley de inteligencia artificial, mientras que un grupo bipartidista de legisladores en Estados Unidos está evaluando un marco de regulación sobre esta tecnología.
El propio Francisco ha sido víctima de imágenes falsas de la IA: a principios de este año, se hizo viral una imagen del papa vestido con una chaqueta blanca.