En el fútbol brasileño, solo tres clubes no habían descendido nunca: Flamengo, Santos y Sao Paulo. Sin embargo, en un hecho histórico, dramático y memorable, el Santos que supo conquistar el mundo con Pelé y formó a Neymar, descendió a la Serie B por primera vez en sus 111 años de historia. En Vila Belmiro, Santos empató 1-1 contra Fortaleza y el triunfo de Vasco Da Gama contra Bragantino (2-1) y la victoria de Bahía (3-1) contra Atlético Mineiro, condenaron al mítico equipo paulista.
Hace tres años, Santos llegaba a la final de la Conmebol Libertadores contra Palmeiras y ahora se encuentra en la peor situación que puede atravesar un club de fútbol, el descenso. El estadio de Santos se presentó colmado y terminó siendo un verdadero drama para los hinchas que se marcharon llorando del dolor y la angustia por ver a su club bajar de categoría.
Santos comenzó perdiendo ante Fortaleza, pero en el complemento (58), un gol de Messias empató todo 1-1 y creía que podía remontarlo. No obstante, el destino ya estaba marcado.
El descenso de Santos a la Serie B es un golpe sin precedentes para el club e indirectamente le da un salto de calidad a la segunda división, donde lo esperan Sport Recife, Ituano, Ponte Preta y Ceará, entre otros. Junto a Santos, descienden Goias, Coritiba y Atlético MG.
