El presidente electo de Argentina, Javier Milei, inició este lunes en Nueva York su primera visita a Estados Unidos tras su victoria en los comicios, un viaje donde el futuro mandatario prevé además reunirse en Washington con funcionarios de la administración de Joe Biden.
Milei y Biden no se verán cara a cara de momento debido a que el mandatario estadounidense estará fuera de la capital cumpliendo otros compromisos, precisó a la prensa el portavoz del Consejo Nacional de Seguridad (NSC, en inglés) de la Casa Blanca, John Kirby.
En Nueva York, el libertario comenzó su agenda con la visita a la tumba del famoso rabino Menachem Mendel Schneerson, conocido como ‘el rebe de Lubavitch’, en el barrio de Queens.
Aunque es católico, Milei mantiene una gran simpatía con la comunidad judía y ya en julio pasado, en plena campaña, había pasado por el sitio de peregrinaje a pedir bendiciones. Ahora regresó para agradecer. Fue un momento «especial, simbólico, muy lindo», dijeron desde su comitiva, reportó el diario argentino Clarín.
Durante la ceremonia, el argentino vistió un traje negro y kipá, salió del cementerio visiblemente emocionado y evitó ofrecer declaraciones a la prensa reunida.
Después de presentar sus respetos, el futuro presidente argentino, que tomará posesión del cargo a partir del próximo 10 de diciembre, almorzó con el exmandatario demócrata Bill Clinton.
Aunque se hablaba de una posible reunión con el también expresidente Donald Trump, quien dedicara elogios a Milei, conocido por sus posiciones de ultra derecha, el propio político argentino informó que el esperado intercambio no tendrá lugar, al menos en esta ocasión.
«Esto no se va a dar en este viaje, pero la reunión con Trump es casi un dato», dijo Milei antes de partir hacia EEUU.