“Mi hermosa primogénita. Estoy tan orgullosa y agradecida de ser tu mamá. Nos traes tanta alegría, mi dulce ángel”, escribió Beyoncé en su perfil de Instagram el pasado 29 de mayo, después de que su hija Blue Ivy se subiera por primera vez al escenario como una de las bailarinas de su gira The Renaissance World Tour.
Lo hizo durante un concierto en París, delante de unas 80.000 personas. Pero no todo el mundo fue tan benévolo y entusiasta con la actuación de la hija mayor de Beyoncé y Jay-Z, de 11 años.
La primera vez que la pequeña se subía a un escenario se convirtió rápidamente en un vídeo viral, y a muchos en las redes sociales les dio igual su edad o que fuera hija de uno de los matrimonios más poderosos de la industria musical y se lanzaron a criticarla, algunos opinando incluso que lo único que brilló de su actuación fue su atuendo plateado.
Según la reseña de The New York Times sobre el estreno de la nueva película sobre la gira, la cantante de Single Ladies o Crazy in Love se quedó “consternada” cuando su hija leyó las publicaciones que criticaban sus “movimientos mediocres”.
“Pero emocionó a su madre porque, en lugar de renunciar, decidió trabajar y entrenar aún más duro para futuras paradas”, escribió el medio este domingo sobre las declaraciones de la artista que se escuchan en su película (Reinassence: A Film by Beyoncé), que llega a los cines españoles el próximo 21 de diciembre.
Beyoncé también admite que la idea de que su hija se uniera a ella en el escenario no era algo que le gustara especialmente. Originalmente, asegura en la película documental, la idea era que Blue Ivy hiciera solo una aparición, e incluso ese no era un plan que entusiasmara a la cantante. “Actuar frente a miles de personas no era lugar para una niña de 11 años”, dice la artista en el filme, según recogen medios estadounidenses como People o Page Six.
De hecho, Beyoncé, con más de 30 años de carrera, confiesa que casi se desmaya la primera vez que su hija se unió a ella en el escenario. “Ella me dijo que estaba lista para actuar y yo le dije que no”, recuerda en una de las primeras conversaciones de la cinta.
Al final, la gira The Renaissance de Beyoncé ha supuesto un descubrimiento también para su hija, que durante los seis meses que se ha seguido subiendo al escenario junto a su madre ha manifestado una gran mejora que no ha pasado desapercibida para los usuarios. En septiembre, una recopilación en TikTok comparó su baile en su primer show, cuando todavía se mostraba bastante tímida con los movimientos, con la confianza que mostró durante una actuación semanas después en Houston.
“Ver crecer su confianza a lo largo de esta gira ha sido un placer”, comentaba un usuario en el vídeo. “¡Ver crecer su confianza a lo largo de la gira me ha hecho sentir muy orgulloso! Ha mejorado mucho”, decía otro seguidor de Beyoncé.
En julio, la madre de Beyoncé y abuela de Blue Ivy, Tina Knowles-Lawson, comentó en una entrevista con la revista People que la confianza de su nieta se había disparado “hasta el cielo” desde esa primera aparición en París.
“Tiene 11 años y tuvo una semana para prepararse, y está mejorando cada vez más, así que soy una abuela orgullosa, siempre”, aseguraba entonces Knowles-Lawson, de 69 años. También bromeó con que la suya es una familia en la que “te entrenan temprano para caminar con tacones”. “Está pasando el mejor momento de su vida, y no podría estar más orgullosa de ella porque realmente trabajó duro”, insistió.
También se muestra orgulloso el padre de la niña, el rapero Jay-Z (Brooklyn, Nueva York, 53 años), con quien Beyoncé tiene otros dos hijos: los mellizos Rumi y Sir Carter, de seis años. El pasado octubre el también productor reconoció en una entrevista en CBS Mornigs que todavía se le pone “la piel de gallina al verla subir al escenario”.
“Ha nacido en una vida que no pidió. Así que desde que nació ha estado en el escrutinio y en el ojo público y todo el mundo tiene una opinión, aunque sea una niña pequeña, de incluso cómo mantiene su cabello”, explicó sobre Blue Ivy.
“Así que, que ella esté en ese escenario y reclame su poder durante la canción My Power [mi poder] es el mejor guion que se puede escribir”, dijo en alusión al tema que canta Beyoncé durante la intervención de Blue Ivy en la gira.
A sus 11 años, la mayor de este matrimonio de artistas ya sabe lo que es que miles de desconocidos la elogien y la critiquen y parece decidida a que lo segundo no paralice un futuro que, tras sus últimas actuaciones, los usuarios auguran prometedor.