Sabemos que aún es noviembre pero, según un famoso psicoanalista, las personas que adelantan la decoración navideña son más felices que las que esperan al último momento o no la ponen. ¿A qué esperas?
¿Tienes prisa por abrir esa caja donde guardas la decoración de navideña, tu árbol, el belén o el espumillón? Pues tenemos grandes noticias para ti, porque la ciencia ha descubierto algo que tú llevabas tiempo notando: la gente que pone la decoración navideña antes de tiempo es más feliz.
Un estudio recientemente publicado en el Journal of Environmental Psychology ha desvelado que los ciudadanos que lucen la decoración navideña a partir de noviembre son más amigables y accesibles con sus vecinos, y por tanto, más felices.
¿Qué fue antes, el huevo o la gallina? Es decir, ¿somos más felices porque decoramos en clave navideña antes de tiempo? ¿O tenemos prisa por llenarlo todo de guirnaldas de luces porque no podemos contener la felicidad? En cualquier caso, el psicoanalista Steve McKeown ha explicado en una entrevista: «En un mundo lleno de estrés y ansiedad, la gente desea asociaciones que les hagan felices; y la decoración navideña evoca esos fuertes sentimientos de alegría de la infancia. La atmósfera navideña sirve de anclaje o atajo para esas emociones mágicas de excitación de nuestra infancia. Por tanto, adelantar la puesta en escena de la decoración navideña extiende la alegría».