Colombia se encuentra en medio de un importante cambio político tras las elecciones regionales que se llevaron a cabo este domingo. Millones de ciudadanos acudieron a las urnas para elegir a sus alcaldes, gobernadores, concejales, diputados y miembros de las Juntas de Acción Local, enviando un claro mensaje al Gobierno nacional con un marcado viraje hacia la derecha y la centro-derecha.
Las principales ciudades del país, como Bogotá, Medellín, Cali y Barranquilla, han sido lideradas por movimientos de derecha o centro-derecha. Carlos Fernando Galán, del partido Nuevo Liberalismo, se ha alzado como el virtual alcalde electo de Bogotá, obteniendo 1.299.757 votos, equivalentes al 48,84% de los sufragios. Esta victoria representa un duro golpe para la coalición del presidente Gustavo Petro, cuya imagen pública ha sufrido daños debido a la falta de estabilidad y proyectos concretos.
Con el 87,77% de los votos computados, Galán ha superado al independiente Juan Daniel Oviedo y al exsenador Gustavo Bolívar, de la coalición oficialista Pacto Histórico. Este resultado señala una derrota significativa para el Pacto Histórico y pone de manifiesto las dificultades internas y la rápida caída de la popularidad del presidente de Colombia.
El exsenador Bolívar ha admitido la derrota y ha expresado su preocupación por la desilusión de la ciudadanía: “Siento un voto de castigo, quiero saber qué sucedió en las regiones, porque sé que no nos fue bien”.
Estos resultados han generado un cambio trascendental en el mapa político de Colombia, dejando al Gobierno de Gustavo Petro en una posición más frágil.