La Venezuela del argentino Fernando Batista hizo historia en el Arena Pantanal al empatar sobre la hora con Brasil gracias a un tanto de chilena de Eduard Bello.
Este inesperado resultado de la selección de Brasil en su casa hizo estallar de bronca al público de la Verdeamarela que se acercó a Cuiabá y uno de los principales apuntados fue Neymar, máximo goleador y referente del plantel.
Cuando la flamante estrella del Al-Hilal de Arabia Saudita, que disputó la totalidad del juego ante la Vinotinto, se dirigía rumbo al túnel fue agredido de manera inesperada por sus propios aficionados.
El ex Santos, Barcelona y Paris Saint Germain fue golpeado en la cabeza por lo que pareciera ser un balde de pochoclos, mientras era insultado por parte de la parcialidad local.
El delantero recriminó el accionar y mantuvo un cruce dialéctico con su agresor, mientras algunos de sus compañeros buscaban calmarlo y guiarlo rumbo al vestuario.
“Es triste, obviamente es muy triste, no vengo aquí de vacaciones ni mucho menos a pasear, vine a hacer lo que más amo que es jugar al fútbol y defender a mi país. Obviamente estamos ahí dando lo mejor, dando lo mejor. Y muchas veces el resultado no llega y no es lo que los fanáticos esperan”, comenzó su relato.
Sin embargo, luego puntualizó sobre la agresión que recibió: “Ni siquiera vi lo que era, solo lo vi cuando me golpeó, me puse muy nervioso, condeno ese tipo de actitud, no hay que hacerlo, es muy malo para el fútbol, para el ser humano. Un tipo que hace este tipo de cosas no es un tipo educado, no podrá educar a su hijo de la mejor manera posible. Si se queja tanto debería haber entrenado mejor y estar en el campo”.