Dos migrantes guatemaltecos murieron y otros cuatro resultaron heridos en un tiroteo en el norte de México, cerca de la frontera con Estados Unidos, un hecho cuyas circunstancias aún no han sido esclarecidas y en el que aparentemente hubo participación de soldados del ejército mexicano.
La Fiscalía de Justicia del estado de Chihuahua informó que el hecho se registró la noche del lunes en las cercanías del cruce internacional Santa Teresa cuando, según el relato de los sobrevivientes, los inmigrantes » se dirigían al muro fronterizo en un camión con una escalera para escalar un muro hacia Estados Unidos» y «fueron tiroteados».
Los lesionados dijeron a las autoridades que llegaron a la frontera «en una camioneta de color guinda, en la cual, el chofer y los otros se retiraron».
El fiscal de Distrito Zona Norte de Chihuahua, Carlos Manuel Salas, dijo en rueda de prensa que los fallecidos, lesionados y el vehículo «se localizaron a varios kilómetros del punto en donde recibieron los disparos, motivo por el cual no se han localizado los elementos balísticos».
Los lesionados son: Selvin Eduardo G. P., de 19 años, quien resultó con una herida en la pierna izquierda; Carlos Humberto R. L., de 19 años, con lesiones en la pierna izquierda y Rigoberto G. Ch., de 28 años, con lesiones en el hombro y en la pierna derecha. Los tres también son originarios de Guatemala.
Además, también resultó herido en la pierna izquierda Raúl de Jesús H. R., de 18 años, originario de Honduras.
Los heridos fueron atendidos en el Hospital General del estado. Tres ya fueron dados de alta y estaban rindiendo su declaración y otro iba a ser intervenido quirúrgicamente.
Salas dijo en una rueda de prensa que los lesionados están recibiendo apoyo por parte de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas y están contactando a las respectivas embajadas «para apoyarlos en lo que sea necesario».
Qué se sabe de los militares presuntamente implicados en el tiroteo
La guarnición militar entregó el mismo día «las armas de la patrulla en la que viajaban los elementos que participaron en los hechos», a quienes entregaron «en calidad de presentados» y rendirán declaraciones a la justicia.
Salas no aclaró si los cuatro militares son formalmente sospechosos del tiroteo y añadió que «un quinto efectivo no había sido localizado».
Indicó que una vez que concluyan con las declaraciones, las necropsias y análisis balísticos, la fiscalía de Chihuahua derivará la investigación a la fiscalía general de la República, «por ser un asunto de carácter federal».