La reportera Heidy Gudiel demostró que tiene un valor muy grande al introducirse a un cementerio de noche.
Gudiel realizó una investigación para evidenciar la profanación de tumbas.
El recorrido nocturno le erizó la piel a la reportera, quien se abrió paso entre los sepulcros.
Lo lamentable es que todavía personas inescrupulosas si dan a la tarea de saquear las tumbas robar las pertenencias y los arreglos florales de los difuntos.