Cristiano Ronaldo y su Al Nassr son la gran atracción de Irán. El conjunto saudí ha viajado en el día de hoy hasta Teherán para medirse este martes al Persépolis. Uno de los clubes más grandes y poderosos de Irán… y de Asia.
Un viaje histórico ya que el Gobierno saudí y la Federación llegaron a un acuerdo y se levantó la prohibición que impedía a los ciudadanos de Arabia Saudí viajar a tierras iraníes. Un veto que llevaba siete años implantado en el país. Un hito histórico que ha permitido ver a estrellas de la talla de Cristiano Ronaldo, Mané, Brozovic, Otávio en el país iraní y no en un feudo neutral.
El crack portugués ha sido protagonista de las historias más curiosas en estas últimas horas en Irán. Cristiano fue agasajado a su llegada al aeropuerto de Teherán por una de las famosísimas alfombras persas. Un presente que provocó el interés del delantero ya que tenía su nombre impreso.
Se entiende que su valor alcanza los miles de euros. Una imagen que habla por sí sola de lo que ha producido ver a jugadores de la talla de Cristiano Ronaldo en tierras de Irán y de la locura que es para el país asiático.
Las primeras horas de Cristiano en Arabia son de absoluta locura. El autobús del Al Nassr fue perseguido por riadas de personas por cada carretera que transitaba. Los más jóvenes gritaban con júbilo los nombres de las mega estrellas del Al Nassr. Cristiano se llevaba los mayores vítores.
Y la llegada al hotel fue abrumadora. La seguridad no daba a basto para frenar a los muchos aficionados que quería ver de cerca a CR7. Fue el caos de tal calibre que el entrenamiento tuvo que ser cancelado debido a la multitud de aficionados frente al hotel y los problemas causados por este tema. Mañana martes se espera lleno total en el Azadi Stadium de Teherán.