Miles de guatemaltecos protestan este lunes frente a las sedes del Ministerio Público en distintas partes del país en reclamo de la renuncia de la fiscal general Consuelo Porras, a quien señalan de intentar impedir que el próximo presidente tome posesión.
Las protestas comenzaron la semana pasada y también exigen la dimisión del fiscal Rafael Curruchiche y del juez Fredy Orellana, a quienes señalan de estar detrás de las acciones judiciales contra el Movimiento Semilla, el partido que dio la sorpresa en las elecciones y que llevó a ganar la presidencia al progresista Bernardo Arévalo.
Curruchiche investiga a Semilla por una denuncia que el mismo Arévalo presentó por una supuesta falsificación de firmas para la formación del partido en 2022 pero que se aceleró cuando el entonces candidato pasó a la segunda vuelta electoral.
El viernes Arévalo le puso nombre y apellido a quienes considera que se encaminan a “un golpe de Estado” en el país centroamericano y acusó a Porras, Curruchiche, Orellana y a la Junta Directiva del Congreso de buscar suspender la personería jurídica de Semilla. El miércoles el Congreso despojó del partido a los diputados actuales de esa fuerza luego del fallo de Orellana que suspendió a Semilla pese a que aún no hay una sentencia firme.
El lunes en siete de los 22 departamentos del país miles de personas protestaron pacíficamente frente a las sedes de la Fiscalía General con pancartas en las que se leía “Consuelo corrupta” y “Renuncia” en alusión a la fiscal general.
Enrique López, del Parlamento Xinca, una organización de autoridades indígenas que ejercen su potestad en tres departamentos del este del país fronterizos con Honduras y El Salvador, informó que “hemos tomado la decisión de tomar las fiscalías para que renuncien Porras, Curruchiche y Orellana porque bloquean el proceso electoral”. Agregó que “como pueblo ya estamos cansados de este sistema corrupto que nos ha gobernado”.