Varias rutas de tránsporte público amanecieron paralizadas en la capital por amenazas de cobros de impuestos de guerra.
Según se ha informado llevaron un teléfono y una nota extorsiva a la estación central de rapiditos de la ruta Carrizal-La Sosa-Centro.
En esta nota se le exige a los transportistas el pago de 800 lempiras semanales, sumándose a los 2 mil semanales que ya pagan a otras estructuras criminales.
El llamado es a las autoridades de seguridad para que investiguen a fondo este flagelo para dar con los criminales que mantienen amedrentados a los choferes de rapiditos de distintas rutas en la capital.