La magistrada del Tribunal Supremo Electoral (TSE) de Guatemala, Blanca Alfaro, adelantó en el marco de la segunda vuelta de los comicios presidenciales, que tomó la decisión de renunciar a su cargo, debido al inadecuado ambiente en que desarrolla su labor.
«Mi función llega a esta elección, para eso me eligieron. No renuncié antes porque era el momento de cumplir con mi país. A partir del día martes, estoy considerando presentar al Congreso de la República (su renuncia) y someterme a cualquier juicio que esté en investigación como una ciudadana común y corriente».
«Es difícil mi situación como mujer y como funcionaria. No había visto elecciones tan complicadas, con tanta polarización. Hay lastimaduras y hay heridas, estamos confrontados y eso no es bueno en una democracia», indicó.
En una democracia, lo que perseguimos es la paz y que se respeten los derechos humanos de las personas (…) En estas últimas semanas hemos tenido momentos difíciles que no nos representan», señaló.
«El ministro de Gobernación me llamó ayer y ha trabajado de la mano con nosotros, como Tribunal; él me ha ofrecido seguridad. Las amenazas en mi contra vienen desde hace como tres meses. Me han dicho que lo que le pasó a la exfiscal Virginia Laparra es lo que a mí me va a pasar», denunció.
La funcionaria no especificó si las amenazas habían sido recibidas por otros magistrados mediante la misma vía, pero aseguró que presentará por su parte la denuncia. “Tengo los chats y tengo los números de teléfono”, declaró.