Unos 18 pandilleros del Barrio 18 y de la Mara Salvatrucha (MS13) fueron capturados en la zona norte de El Salvador en el contexto de un cerco de seguridad instalado desde el martes para «acorralar» y detener a remanentes de las maras que supuestamente han huido de la ciudad a lo rural. Las capturas habrían sido realizadas entre el martes y el jueves, según confirmó este viernes una portavoz de la Presidencia.
Los miembros de pandillas guardan detención en la delegación policial del municipio de Sensuntepeque, en el departamento de Cabañas, cuyas entradas y salidas se mantienen custodiadas desde el martes por miembros de la Policía y del Ejército. Algunos de los detenidos, entre los que se encuentran tres menores y dos mujeres, fueron identificados con nombre y apellido. «Todos» los detenidos, según la fuente, serán acusados de agrupaciones ilícitas.
La prensa local cita al director de la Policía, Mauricio Arriza Chicas, que informó que un cabecilla de la mara Salvatrucha fue abatido al ofrecer resistencia armada. «Es así como se le da muerte a un pandillero, uno de los ranfleros (jefes), uno de los terceros al mando de la estructura criminal, del grupo armando que son remantes de la MS13», dijo, aunque sin identificarlo.
El cerco de seguridad en Cabañas (norte), a más de 80 kilómetros de la capital San Salvador y constituido por nueve municipios, se ampara en un régimen de excepción que es implementado desde marzo del 2022 para combatir a las pandillas y por medio del cual han sido detenidas más de 71.000 personas señaladas de ser miembros de maras. Organizaciones humanitarias han denunciado abusos en su aplicación.
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