Fuentes de los servicios especiales ucranianos afirmaron este viernes que el ataque con drones de la madrugada contra el puerto ruso de Novorossiysk causó daños severos al buque de desembarco anfibio «Olenogorsky Gornyak”. Videos publicados en redes sociales muestran el barco escorado y rodeado por otras embarcaciones más pequeñas, pese a que las autoridades rusas aseguraron haber repelido con éxito el ataque.
«La operación especial fue llevada a cabo junto con la Marina. Como resultado del ataque, el ‘Olenogorsky Gornyak’ sufrió un gran agujero y en estos momentos no está en condiciones de realizar funciones de combate», afirmaron fuentes de los servicios de seguridad citadas por la agencia «Interfax”. «Todas las declaraciones rusas que dicen que el ataque fue rechazado son falsas», agregó esta misma fuente.
En consonancia con las informaciones proporcionadas a «Interfax», en un video que circula en redes sociales y que muestra presuntamente el ataque, se puede ver cómo un dron marino de superficie ucraniano, cargado con 450 kilogramos de TNT, choca con el barco, tripulado en ese momento por un centenar de efectivos rusos. Se desconoce si hubo bajas entre la tripulación.
Segunda base en importancia
Una segunda fuente, esta vez citada por la agencia Reuters, confirmó el ataque. Se trata de alguien que trabaja en el puerto ruso, quien informó que una embarcación rusa de gran calado era incapaz de moverse por su cuenta debido a los daños sufridos tras un ataque. La misma fuente aseguró que las exportaciones de granos y petróleo que tienen lugar en ese puerto siguen su curso sin contratiempos.
No es la primera operación con drones marinos reivindicada por los servicios secretos ucranianos, que ya se han atribuido los ataques contra la bahía de Sebastopol el año pasado y la voladura del puente de Kerch, en la Crimea ucraniana ilegalmente anexada por Rusia en 2014.
El Ministerio de Defensa ruso informó más temprano de un intento de ataque con drones contra instalaciones militares en la península de Crimea y contra el puerto de Novorossiysk, cuya base naval es la segunda en importancia para la Flota rusa del mar Negro, después de la de Sebastopol. Según el Ministerio, los drones fueron detectados y destruidos por los buques que custodiaban la base antes de que pudieran alcanzar sus objetivos.
