Un congresista latino inició este martes una huelga de hambre y sed para denunciar una ley recientemente promulgada en Texas que eliminará el derecho a descansos para los trabajadores que laboran a cielo abierto expuestos al intenso calor, muchos de los cuales son inmigrantes.
Gregorio Casar, un legislador demócrata cuyo distrito se extiende desde Austin a San Antonio, dio comienzo a la protesta el martes a las 10:30 am y continuará «mientras que le sea posible físicamente», indicó su director de comunicaciones.
La protesta de Casar tiene lugar antes que entre en efecto, el 1 de septiembre, la medida aprobada por la legislatura estatal y rápidamente firmada por el gobernador, Greg Abbott, a mediados de junio.
La ley elimina, entre otros, el derecho a los descansos de 10 minutos cada cuatro horas para los trabajadores que laboran expuestos al sol.
Congresistas y activistas han expresado preocupación por el peligro de la intensa ola de calor que afecta a gran parte de Estados Unidos, y particularmente a Texas. De acuerdo con la Oficina de Estadística Laborales, más de 400 trabajadores han muerto en el país debido al calor desde 2011.
Al defender la ley, sus partidarios argumentaron que las regulaciones locales se aplicaban de forma «incoherente» y obstaculizaban la capacidad del estado para regular el comercio.
Sin protecciones federales
En un comunicado, la oficina del congresista Casar indicó que el legislador «no va a ingerir agua ni comida y tampoco va a tomar descansos hasta que los enfermeros le pidan que ponga fin» a la huelga.
Casar afirmó que «actualmente no existen protecciones federales para los trabajadores que están expuestos al calor».
En un mensaje de Twitter, el legislador aparece bebiendo de un vaso con el mensaje: «Acabo de tomar mi último sorbo de agua antes de la huelga junto a la gran y única Dolores Huerta».