Nasser al Khelaifi visitó a la plantilla de Luis Enrique en el nuevo centro de entrenamiento de Poissy. No hubo el esperado cara a cara entre Kylian Mbappé y el presidente del PSG. Lo más cerca que se les vio fue en la foto que todo el grupo se hizo para el homenaje a Sergio Rico y la estrella, en la esquina de la imagen, aparecía lo más alejado posible del grupo de jugadores de Al Khelaifi, en el centro de la instantánea junto a Luis Enrique con la camiseta del portero español.
El presidente del PSG se dirigió al grupo durante unos quince minutos para confirmarles la política del club de colocar a la institución por encima de todos. El mensaje era por tanto general, pero dado el pulso que mantiene el club con Mbappé es evidente que se le puede dar como uno de los grandes aludidos.
En consonancia con el nuevo tono del presidente y del club, que comenzó con la sanción a Messi, el discurso fue muy claro: «Nadie está por encima de la institución, tampoco yo, y el que no quiera jugar por el escudo o no lo respete no debería estar aquí. El club ha construido las mejores instalaciones del mundo (Poissy) para que los jugadores prosperen, ahora no hay excusas. No os va a faltar nada. Nos tenemos que concentrar en rendir y luego vendrán los resultados. Podemos hacer un gran fútbol y los jugadores tienen que corresponder a los aficionados y al club que les apoya».
En cuanto a Mbappé, no hubo avance alguno. El club sigue esperando por ahora una respuesta de Mbappé tras la carta que el club le envió el pasado 3 de julio para que se sentaran a negociar y dieran con un acuerdo antes del 31 de julio. Fuentes del PSG confirman que esa sigue siendo la fecha límite, sobre todo legalmente, pero como dijo Al Khelaifi tras la presentación de Luis Enrique cuando antes se resuelva, mejor. Renovación o venta ya.