Gracias a HCH y Fundaniquem, el pequeño Jonathan Castillo, un niño de bajos recursos que se quemó con agua caliente y se vio afectado en gran parte de su cuerpo, recobró la movilidad.
Jonathan venía de Cortés y había perdido la movilidad de su cuello por las quemaduras, pero una serie de intervenciones le ayudaron de gran manera a normalizar su vida.
El Doctor Omar Mejía comentó que «él sufrió una quemadura del 70% de su cuerpo. Por extrema pobreza aquí y salió en HCH que el menor estaba teniendo una contractura y no podía mover su cuello. Gracias a ustedes HCH nos lo trajeron, hicimos grandes reconstrucciones y se hizo un gran trabajo. El niño estaba confinado, pero gracias a Fundaniquem y HCH este pequeño él va saliendo bien».