El gobierno del estado brasileño de Alagoas, en el noreste del país sudamericano, declaró el sábado en situación de emergencia a 29 ciudades a causa de las fuertes lluvias que desde el viernes han afectado a 16.000 personas y han provocado un fallecimiento.
El gobernador Paulo Dantas decidió instituir el «estado de emergencia» por decreto por espacio de 180 días, para facilitar el desembolso de recursos financieros y logísticos que agilicen las ayudas a las comunidades más afectadas por las inundaciones, los derrumbes de edificios y los deslizamientos de tierra.
El Centro de Mando de la Defensa Civil establecido en la región nordestina reportó que hasta las primeras horas del sábado 14.338 personas tuvieron que abandonar urgentemente sus casas ante el peligro de inundaciones y deslaves, mientras otras 2.085 perdieron todas sus pertenencias por la fuerza de las aguas.
A causa de las grandes inundaciones, varias comunidades han quedado completamente aisladas, al punto que el acceso a estas solo es posible por medio de lanchas o helicópteros.
Tras el desbordamiento de varios ríos de la zona, un hombre murió ahogado en el municipio de Joaquim Gomes al ser arrastrado por la corriente.