Contrario al resto de funcionarios de la administración de la presidenta Xiomara Castro, que tras ser destituidos de sus cargos toman como “premio de consuelo”, un puesto en el Servicio Exterior, el exsecretario de Seguridad, Ramón Sabillón ha dicho no a la propuesta de la mandataria.
Sabillón fue separado como titular de la Secretaría de Seguridad, el pasado 20 de junio, tras la muerte de 46 reclusas en una reyerta en la Penitenciaría Nacional Femenina de Adaptación Social (PNFAS) en el Valle de Támara, Francisco, Morazán.
Su lugar fue ocupado por el general Gustavo Sánchez quien fungía como director de la Policía Nacional, y quien, a días de asumir el cargo, ya enfrentaba una ola de violencia con al menos tres masacres en el Valle de Sula.
Se conoció que el general Sabillón tuvo ofrecimientos desde Casa Presidencial para ir al servicio exterior como embajador, sin embargo, declinó la propuesta y de momento permanece en Honduras.